No es un secreto que el mercado laboral para desarrolladores web y programadores sigue en auge. La demanda de estas disciplinas del mundo TI sigue siendo una de las más solicitadas a nivel mundial.
Según un informe de Stack Overflow, los índices de empleabilidad para programadores y desarrolladores llega casi al 90%.
En América Latina, las expectativas no son distintas. Según un reporte del BID, para 2025 la región necesitará más de 1,2 millones de expertos en software, lo cual ampliará aún más la brecha entre vacantes y prospectos que existe en el mundo TI actualmente.
Para entender un poco más sobre esta realidad en Chile, hemos conversado con Mauro Andrés Sanhueza, desarrollador fullstack en Walmart, quien cuenta con una carrera profesional destacada que le ha permitido conocer muy bien el funcionamiento del mundo TI nacional.
El inicio del camino
P: ¿Cómo empezó todo?
MS: Yo entré a la informática más viejito. Hoy en día, la mayoría de los desarrolladores entra a sus veintitantos, yo lo hice más grande.
Pero, desde que entré, la constante ha sido el movimiento: he tenido que asumir muy diversos roles y experiencias: soporte, arquitectura, frontend, backend, entre otros.
Con los años me fui interesando por más cosas. Me adentré en el DevOps porque me gusta mucho la cultura de su metodología.
Al final, el informático va mutando en la medida que sus funciones y desafíos van cambiando. Constantemente tienes que ir adquiriendo nuevos conocimientos; es así como te vas transformando en full stack.
P: ¿Cómo definirías el perfil de un desarrollador full stack?
MS: En el fondo, en el mercado laboral hay un mal concepto del full stack.
El full stack no existe como tal. Una empresa no puede buscar a una persona que sepa de todo. Ciertamente, un informático puede conocer muchas tecnologías y lenguajes pero no se le puede exigir que las domine todas por igual.
No puedes decir que conoces la Araucanía o la Patagonia, si solo estuviste un par de días. Lo mismo pasa en el mundo del desarrollo web. Si bien hay profesionales que aprenden más rápido que otros, siempre será necesario vivir con cada tecnología que se vaya a aprender; hay que sufrirlas e ir adquiriendo los conocimientos necesarios.
P: Sin embargo, las empresas siguen abriendo vacantes para ‘desarrolladores full stack’. ¿Cuál crees que es su función?
MS: El desarrollador full stack es un profesional que al menos conoce o ha estado en contacto con dos submundos: el frontend y el backend.
Para mí ‘Full stack’ significa disposición. Es un término que refiere a un profesional dispuesto a aprender de todo; un perfil curioso, siempre motivado a descubrir y entender por qué pasan las cosas y cómo se pueden hacer de forma distinta.
De hecho, visto de esa forma, un desarrollador tiene que ser por definición full stack. Es natural. Tiene que ser un profesional capaz de adaptarse constantemente a los cambios.
P: ¿Qué te agrada y desagrada del mundo del desarrollo full stack?
MS: Lo que me desagrada es que, cuando dices que eres full stack, las personas piensan que debes saber todo de todo. Eso me desanima porque está totalmente alejado de la realidad.
En contraste, lo que me gusta es que, por la misma naturaleza cambiante del entorno informático, tienes que aprender cosas nuevas constantemente. La exploración y el descubrimiento nunca terminan. Me gusta mucho tener la oportunidad de conocer nuevos mundos.
Formación constante
P: ¿Qué conocimientos nuevos has aprendido últimamente y de qué forma tratas de mantenerte actualizado?
MS: Actualmente, estoy reforzando mucho mis conocimientos en temas de agilidad. Me estoy orientando a la gestión, hacia el rol de PO.
El puesto de PO es muy desafiante por lo iterativo que es. Tú puedes leer muchos papers pero tienes que asumir que ese conocimiento puede cambiar de un día a otro.
Con los años, he aprendido que los productos se tienen que desarrollar paso a paso. Hay que comenzar con lo más básico e ir haciendo las cosas bien desde el día uno.
Ir paso a paso entregando un producto de calidad en un tiempo razonable.
P: ¿Cómo ha sido tu experiencia en Walmart?
MS: Yo entré a Walmart en septiembre de 2019.
He cambiado de equipo varias veces. Con el primero, me tocaron varios temas de backend, procesos de administración de órdenes, soporte, entre otros… fuimos arreglando muchas cosas. Fue interesante porque me vi volviendo a lo básico.
Ahora estamos trabajando en un portal de venta en verde. Estamos desarrollando piezas, procesos, bastante frontend. Mucho de ese tiempo lo dedico a la relación con stakeholders. En general, demanda mucha gestión.
P: ¿Cómo manejas las barreras comunicacionales en los procesos de desarrollo?
MS: Bueno, hay algo que nunca cambiará: los bloqueantes que surgen en las últimas instancias siempre te van a generar problemas serios.
Por eso, el mayor desafío está en la cultura de desarrollo. Hay que visualizar cómo avanzamos día a día. De esta manera, se podrá detectar con antelación si algo se va a retrasar. La comunicación y la colaboración son fundamentales en estos procesos.
Tú puedes tener muchos equipos desarrollando productos diferentes; pero ninguno puede funcionar como satélite. Todos deben estar relacionados. De allí la importancia de la colaboración.
En empresas como Walmart esta cultura ha sido muy bien desarrollada: si alguien tiene un problema, puede confiar en que cuando levante la mano, siempre habrá otros compañeros dispuestos a ayudarlo.
Qué depara el futuro
P: Qué te gustaría hacer más adelante
MS: Yo quiero crecer hacia el cargo de PO. Ser el líder de un producto.
El Product Owner debe tener una visión clara de lo que sucederá con su producto. Asimismo, debe alinear muy bien los desafíos técnicos con las exigencias del negocio.
Pero lo más interesante y desafiante es que no hay una ruta única. Es lo entretenido del Scrum: no existe tal cosa como un manual que debes seguir al pie de la letra. La adaptación al contexto y las exigencias cambian todos los días y hay que saber girar a tiempo y girar bien.
P: Qué piensas de las certificaciones
MS: Voy a ser muy franco: en todos los años que llevo de carrera, el 90% de los mejores informáticos que he conocido son profesionales autogenerados. Con suerte tienen cuarto medio.
Muy pocas veces me he encontrado con profesionales de universidades tradicionales que sean buenos. Es muy raro.
Los mejores en los informáticos son aquellas personas que se dedican a esto porque simplemente les gusta harto.
La certificación no siempre te certifica. Memorizar una serie de conocimientos, que el próximo año podrían quedarse obsoletos, no me hace mucho sentido.
Con esto no estoy diciendo que no sirvan. Mi punto es que lo que más necesita un informático es motivación.
[Según un informe publicado por Hired, uno de cada cinco ingenieros de software aprende por cuenta propia].
Conclusiones
Es una realidad que la demanda de perfiles informáticos crece cada día más rápido. Según el informe State of Software Engineers 2020, desarrollado por Hired, la demanda de ingenieros de software es impresionante.
Acá algunas de las cifras de crecimiento de la demanda por vacantes:
Sin duda, el mundo TI es una de las áreas de trabajo más atractivas de la actualidad. En un mercado laboral que se ha visto fuertemente afectado por la Covid-19, apostar por una formación en este campo puede ser una opción muy positiva para miles de jóvenes profesionales.